cuando todo estaba bien

Ayer.

Ayer vimos el caso de Grecia, sus números y su democracia pensionista.

Igual también puede ser la cuna de la demo (me voy a enredar, lo dejo aquí).

Vivimos en un tiempo que no es de prueba. Es real y producto definitivo.

No hay vuelta atrás. Cero atajos a la vista.

Quizás en unos años digamos la frase del asunto (te la canto en la PD).

Hablamos de las pensiones y de su imposibilidad.

Las matemáticas básicas que confirman la mentira incómoda que nos dicen nuestros políticos (igual da) con una sonrisa.

Devuélvele la sonrisa. Mejor, ni mirarlo (tempus fugit)

Lo de ayer de Grecia es lo de España de hoy y lo del mundo del mañana.

La caída de un sistema que ya no funciona igual (ahora somos viejos sin descendencia, economías inestables, presiones fiscales confiscatorias... )

Vengo con gráfico.

España, ¿la siguiente?

Bueno, al menos la segunda. Pero para eso están los Bancos Centrales. Para imprimir llenando de papeles sin valor el sistema.

¿Cuándo explotará? Si lo sabes avisa.

Pero explotará.

Y volvemos a los griegos. Concretamente, los nuevos influencers: los estoicos.

Sí, ¿qué vamos a hacer? Es lo que nos ha tocado vivir.

Después de llorar acordándonos de cuando todo estaba bien, lo que sí podemos hacer es elegir cómo reaccionar. Muy estoico.

Prepararnos.

E igual me equivoco, pero una d las formas que parece más sólida para estar preparado impasible ante lo que pase es no depender de nadie.

¿Del Estado? Meh

¿Del banco (ojo que hay mucha relación)? Meh

Ingresos, ahorros, inversiones… sin intervenciones. Paz.

Y ya.

¿Será posible? Un intento en Banca sin Bancos.

De momento no hay BsB (bueno, hay, pero no hay). Lo que sí hay es un regalito debajo por si quieres que alguien que quieres también oiga estas vainas e igual… también llegue a hacer banca sin bancos.

^{Te canto el PD. Es musical y hay mucha barba pero es muy dulce (incluso azucarado) Y cuando veas las barbas de tu vecino cortar… En el PD}