De hecho me echaron de un banco

EX banquera y EX banquero te dicen algo

Más alto que el horizonte. Quiero tener buena vista.

Ex Banquere no hay.

Pues eso que hoy me escriben el correo unos ex-banqueros.

(Bueno, el que te escribe también lo es. Aunque duré bien poco).

Verás, sigo a bastante gente que habla del vil metal: dinero.

Entre esa gente está una ex-banquera.

Y hace un tiempo me guardé uno de sus correos para plasmarlo por aquí, porque me pareció una verdad verdadera.

El caso es que ese correo me ha venido hoy a la cabeza porque leyendo en un foro (también de pasta) me he encontrado con un comentario de otro ex-banquero.

Y todo ha hecho match, a lo 14 de febrero (no, por favor).

Demos paso a los ex-banqueros.

Ex-banquera al habla:

Después de trabajar 14 años en la banca, 11 de ellos como directora de oficina, he visto a miles de cuentas y clientes.

Miles de situaciones diferentes, muchas con un denominador común:

La falta de conocimiento financiero.

La banca tiene una percepción negativa, a veces con razón, pero aún así las personas depositan su confianza y sus decisiones a las personas que allí trabajan.

Desde luego que confianza ha de haber, pero ¿por qué dejar en sus manos las decisiones?

Muchas veces me decían: Patricia, tengo este dinero ¿qué puedo hacer con él?

Pocos han venido y han dicho:

Tengo este dinero y quiero invertir en esto y lo otro.

Por eso una cosa es la confianza y otra cosa es dejar en manos de un empleado de banca, decisiones que has de tomar tú.

Y no lo digo porque te vayan a engañar, que en alguna ocasión contada puede darse el caso.

Lo digo porque al final estás dejando tu futuro financiero en manos de otra persona.

Tranquilidad, esta Patricia no es Ana Patricia.

Vale, bueno. Bajo mi sesgada opinión no solicitada coincido en un tanto por ciento muy elevado. Un 93% por decir algo.

Esta señora tiene experiencia en banca (unos añitos pasó), un servidor no supero los seis meses. Así que sabe (mucho) más que el que te escribe. Al menos en el contexto bancario comercial.

Pero.

Pero en esos 6 meses no engañé a nadie.

¿Por que soy más bueno que un político en campaña?

Pues no. Porque no sabía vender.

Me dieron unos folios con unos nombres raros que representaban a fondos de inversión y me soltaron: Oye, véndente por ahí a algún despistado que tenga dinero aburrido en la cuenta.

Me daba tanta vergüenza no tener ni idea de qué iba esa vaina que pocas veces me atreví a decirle a alguien nada.

Pero, amigo, yo jugaba con ventaja: llevaba corbata.

No la aproveche, pero la tenía.

E igual a ti te parecerá una chorrada. Pero no lo es. Por muy mal que yo supiera vender y por poca idea que tuviera en aquel entonces de qué era un fondo de inversión y cómo funcionaba, mi corbata daba respeto.

Mi corbata hacía pensar a algún despistade que yo sabía más que él y que le podía a ayudar a sacarse algo de rédito a su cartera llena y parada.

Es igual que la médica que lleva una bata:

— Tómate Paracetamol y mucha agua.

Sí, señora

Pues eso es lo normal en tu banco. Que no es que te quieran engañar, es que no tienen ni idea. En serio, igual saben alguna palabreja que te pueda intimidar (tipo trócola, gamusino…) pero su conocimiento no es abundante.

Es una tienda de dinero manejada en las alturas por gente poco honesta.

Es un negocio en el que las partes no están equilibradas.

Sus productos no tienen buena fe.

Y te lo va a corroborar un ex-banquero que sí sabía lo que hacía:

Yo llevo usando xxxxxxxxxx con todo tipos de activos desde hace años.

De hecho me echaron de un banco por negarme a rotar la cartera de un cliente cuando xxxxxxxxxx y en positivo.

… más fácil de aplicar e irónicamente la más rentable…

Pues eso, parece que cuando no le interesa al banco que el cliente gane dinero…

Te echan.

Me recuerda a los casinos y casas de apuestas. Pero eso de para otro correo.

Si te hacen pensar en algo estos banqueros, quizás, tu también quieras convertirte en EX.

Ya ves, justo hoy, el supuesto día del “amor” hablamos de EXes.

Todo se va abajo.

Abajo.

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