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de verdad que... lo tengo
en la garganta
pies descalzos, arena virgen, Copacabana…
Puedes leerlo cualquier día.
Pero hoy.
Hoy es 15 de enero.
La tienda de hacer dinero gringa (la bolsa americana) está cerrada.
Y está cerrada porque es fiesta en el país Gringo.
MLK day.
Hoy se conmemora el nacimiento de Martin Luther King.
Un negro que tuvo las cosas muy claras.
Y triunfó. Repasemos su triunfo.
Hay muchas cosas que podríamos hablar de este señor.
Por ejemplo esta:
Foto de Martin Luther King, Jr. siendo detenido en Montgomery (Alabama) por «vagancia» en septiembre de 1958.
A Martin le acusaron de muchas cosas en su lucha por los derechos civiles.
Dijeron muchas mentiras sobre él y los suyos.
¿Sabes por qué le arrestaron en esta ocasión (la de la foto)?
Por vago. Sí por vagancia. ¿Vagancia?
Al menos eso es lo que pone al pie de la foto (copiada de wikipedia).
Lo curioso es que cuando le metieron un tiro en la garganta (es muy metafórico que fuera en la garganta, ¿no te parece?) y tuvieron que hacerle la autopsia, se descubrió que:
Según el biógrafo Taylor Branch, la autopsia de King reveló que, aunque solo tenía 39 años, su corazón parecía el de un hombre de 60, mostrando el efecto físico del estrés de 13 años en el movimiento de los derechos civiles.
Entre 1957 y 1968, King había recorrido más de 9,6 millones de kilómetros, hablado en público más de 2500 veces, arrestado por la policía más de 20 y había sido agredido físicamente al menos en cuatro ocasiones.
Pues ahí tienes las jugadas del sistema, la vagancia, la mentira.
Martin luchó lo inimaginable persiguiendo un fin noble. Y lo hizo desde el convencimiento más profundo.
Eso le llevó también a pensar en cómo podía lograr su sueño. Sueño que, después de mucho esfuerzo, empezó a cumplir.
Para empezar a cumplirlo analizó lo que a otros les funcionó.
Y se fijó en su referente (que para eso era pastor): Jesucristo.
Tranquile que la misa es pa’l domingo.
Sí, se fijó en cómo él, Ghandi y otros habían conseguido una revolución a raíz de la desobediencia civil no violenta.
Dicho y hecho.
No importó lo que se puso por delante, su lucha solo acabó cuando acabó su vida. Y su vida, como sabes, no fue en balde.
¿Te suenan estas cosas?
Por si no te suenan te las canto.
El sistema financiero de hoy en día nos la está jugando.
Y el sistema está montado para que seamos bien sumisos.
Sin embargo, la buena educación nos puede enseñar cómo manejar nuestro dinero e incluso ver las alternativas que se están generando gracias a la evolución y uso de internet.
Una lucha todavía silenciosa (o silenciada e incluso insultada a lo vago), pacífica pero determinante.
Una alternativa que (y perdona) nos puede hacer soñar.
Los motivos no serán tan puros como los de Martin, pero Banca Sin Bancos defiende eso. Ser libres e iguales.
Y abajo te dejo el enlace (por si tú también lo tienes).