Misa (una vela por...)

alcanzando el nirvana

Hace 2 días hizo 30 años.

Un viernes 5 de abril de 1994 a las 11:30 de la mañana se escribiría el siguiente parte médico:

Herida por bala infligida en la cabeza.

Con resultado de muerte.

Vaya, que alguien se había pegado un tiro.

Ese alguien era Kurt Cobain, cantante del mítico grupo Nirvana.

Acabo de repasar su vida y… parece que nunca lo encontró.

La verdad es que hay vidas de mierda, da mucha pena.

No me voy a meter en esa movida ahora porque venía con la idea de hacerte un canto a la vida, la que le hizo Kurt. Aunque la acabara a los 27.

Y es que su canción más famosa fue, es y será: Smells like teen spirit.

¿A qué te suena teen spirit?

A mí me suena mucho a vida, mucho a hormona. A (mucho).

PERO.

Pero esa canción es indescifrable. Y ya sabes que aquí, por deformación profesional, tendemos a relacionarlo todo con la banca.

Espera, que te lo canto.

Verás, la canción “parece” que es una loa a la vida juvenil. Pero en realidad nadie sabe qué significa, porque no tiene sentido. ¿O sí?

Realmente, es igual que el sistema financiero tradicional o bancario. La idea es buena, suena bien. Suena tan bien, que es un éxito comercial, pero nadie la entiende porque no se puede entender. O si la entiendes es porque entiendes que es una locura. No sé si me entiendes la redundancia.

Por si te sirve, te copio y pego los comentarios que se hacen sobre la banca canción.

El libro Teen Spirit: The Stories Behind Every Nirvana Song describe “Teen Spirit” como “una exploración típicamente turbia de Cobain sobre el significado y el sinsentido”.

El punto que emerge no es sólo el conflicto de dos ideas opuestas, sino la confusión y la ira que el conflicto produce en el narrador: está enojado porque está confundido.

Es como el sistema financiero tradicional. Contradictorio, confuso y turbio.

Cuando llegas a entender su sinsentido te causa ira.

Pero atento a lo que dice el propio Kurt de su canción:

Toda la canción está compuesta de ideas contradictorias... Simplemente se burla de la idea de tener una revolución. Pero es una idea agradable.

El sistema financiero tradicional vive de esa idea, de “parecer” agradable.

Y aquí NO coincidimos con el amigo Kurt. La idea de una revolución es posible y es realmente agradable. Mucho más que una ilusión.

No es una ilusión porque ya es.

Muchos ya lo han visto.

Jolin, si es que a veces puedes sentirte de nuevo como un teen.

Ese es el spirit.

Muy libre.

Mucho.

Ah! Tan libre, que quizás, encuentres el nirvana financiero.

(ya sé, era muy fácil).

Te dejo con la canción.

Perdón, no era esa. Era esta.

No te vengas abajo.

O si.

Igual el nirvana no está arriba, está…

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